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Bueno, personalmente tuvimos una mala experiencia con este hotel.. de parte buena, el hotel es precioso, está muy bien decorado y el servicio es muy bueno, la comida muy buena (no hay restaurantes fuera, solo el hotel). Cuando vas cambiando esta lleno de ranas y es precioso (si te gustan) Estas en pleno arrozales y puedes ayudarles a coger el arroz y caminar por allí. La ubicación del hotel está en el fin del mundo. Parecía que estaba cerca, pero no. Hay que subir toda una montaña, y bajar toda esa misma montaña, que si a eso le incluyes lluvía… fatal. nosotros escogimos este hotel para poder estar en las habitaciones que estaban en el la Fuimos hasta allí (fin del mundo) para esas habitaciónes.. al llegar, me dijeron que esas habitaciones estaban rotas (después nos hicimos amigos de los clientes y es que habían ampliado los días, eso me decepciono por mentirme).. de manera muy simpática nos ofrecieron un aumento con una villa… (cosa que yo les dije que no quería eso, quería estar en el lago…) como no hubo solución la cogimos… pero a partir de allí,… nos hicimos un masaje muy bien hecho, las masajistas son bastante buenas ( y no hay mucho que hacer a no ser que te hagas un masaje, y no es muy caro, caro comparado con la calle, pero no con sitios muy caros… 400k) al salir queríamos usar la bañera (por cierto, enorme y preciosa) pero no había agua caliente en nuestras habitaciones… nos ofrecieron ducharnos en otras dos villas pero tampoco tenían agua caliente (veníamos del viaje y queríamos una ducha si o si) . Al día siguiente la arreglaron. La siguiente noche, Post masaje… estábamos tumbados en la cama y nos pasó una rata por encima de la cama y otra por la cortina… y es que era Obvio (de los pocos sitios en bali que no tenian gatos..) y tenian todo abierto ( en otras cabañas que he ido, tenian rejilla, mosquitera o impedimentos para que no pasen) intentaron ayuntarla.. pero aún así, al mirar debajo de la cama había cacas y rastros de rata, por tanto se nota.

Los Bungalows son encantadores, romanticos y muy bonitos. todos con piscina delante tambien muy bonita. intimo y relajante. volveria sin dudarlo.

Komang fue un magnífico anfitrión nos enseñó su casa dando un paseo por la naturaleza y un poco de su cultura como la preparación de un postre casero que estaba muy bueno.

Todo impecable! Personal súper atento, todo súper limpio, masajes súper relajante, comida rica! Fue uno de los sitios más bonitos de mi viaje a Indonesia. Volvería sin duda😊

Muy buenas vistas, buen recibimiento, personal encantador y amables, las instalaciones también muy bien, bonitas y limpias

El lugar es precioso, la habitación muy limpia, las sábanas olían de maravilla, con baño privado. Al estar cerca del monte la temperatura es más baja por lo que no hace falta aire acondicionado. Jardín y piscina compartido, muy bonito, con vistas a las montañas. La familia que lo lleva son muy atentos y agradables. Tienen servicio de lavandería y restaurante. El precio inmejorable. Ibamos a quedarnos solo una noche y al final alargamos la estancia. Lo recomiendo 100%.

Ketut es muy amable y siempre estuvo disponible para ayudarnos: organizar el trekking al volcan, recomendarnos un buen sitio donde comer, buscar transporte... Esta aprendiendo con muchas ganas a trabajar en el turismo de su región (antes era granjero) El desayuno buenísimo, las vistas al lago increíbles Los bungalows es bonito y bien cuidado aunque le falta algo de luz y algunos detalles

ketut, el dueño es muy amable. Tiene consejos y recomendaciones de la zona. La cabaña es fenomenal con todo lo necesario: toallas, jabón, secador, papel, tetera y cafe instantáneo. Tiene un porche muy agradable e intimo y con bonitas vistas al jardin. La comida buenísima, el café tradicional espectacular! Ah y me dejaba lo mejor: tiene una especie de ‘jacuzzi’ con aguas termales ideal para disfrutar de la luna y las estrellas! Super recomendable